La Generalitat Valenciana ordenó la construcción de tres hospitales de campaña en las tres ciudades principales de la Comunitat Valenciana: Valencia, Castellón y Alicante. Por localidades, cada hospital de campaña cuenta con una capacidad de 500 camas en Valencia, 400 en Alicante y 200 en Castellón.

Así, en la ciudad de Valencia, tras los primeros trabajos de movimientos de tierra, limpieza y allanamiento del terreno, se suministró el cemento necesario para fabricar los 1.200 m3 de hormigón con los que se hicieron la explanada base para el hospital de campaña.

En el caso de Alicante, se fabricaron en la planta de Rabasa casi 1.000 m3 de hormigón, que fueron suministrados por unas 70 hormigoneras. En Castellón, fueron 650 m3 de hormigón los que se fabricaron en la planta de Almazora necesarios para hacer la explanada.

Gracias a las características especiales del hormigón de CEMEX, la maquinaria ligera necesaria para la ejecución del resto de los trabajos para la instalación hospitalaria de emergencia, pudo transitar por la superficie a las pocas horas de su puesta en obra.