La demanda de cemento en Andalucía cerró al mes de noviembre de 2018 con un crecimiento interanual acumulado del 11,6%, la mitad de lo que experimentaba el sector al cierre del 2017, año que finalizó con un crecimiento del 22%, según recoge el último Barómetro del Cemento1, indicador adelantado del consumo de cemento elaborado por el departamento de Estudios de Oficemen.

En valores absolutos, el Barómetro estima el consumo de cemento en Andalucía, en los últimos 12 meses del periodo analizado (diciembre 2017-noviembre 2018), en 2,5 millones de toneladas, un volumen similar al que se consumía hace casi 50 años.

La recuperación de la construcción iniciada el año pasado en Andalucía está dependiendo fundamentalmente de la edificación, ya que la inversión real de obra pública consumidora de cemento se encuentra prácticamente estancada en su nivel más bajo de la última década.

Las exportaciones de cemento y clinker desde Andalucía continúan con una evolución muy negativa, con un descenso interanual del 25,7% al mes de octubre de 2018, debido al incremento de los costes eléctricos y al precio de los derechos de emisión de CO2, que están lastrando la competitividad del sector en los mercados internacionales.