El índice de Demanda de Cemento en Andalucía ha registrado un descenso del crecimiento interanual en el mes de mayo con respecto a abril del 2,2%, quedando dicho crecimiento interanual en un 11,5%, y alcanzando en los últimos 12 meses analizados (junio17-mayo18) un consumo de 2,3 millones de toneladas, según recoge el último Barómetro del Cemento1, indicador adelantado del consumo de cemento elaborado por el departamento de Estudios de Oficemen.

Por lo que respecta al consumo de cemento por destinos finales durante el primer trimestre de 2018, se observa un aumento significativo del 32% con respecto al mismo período del año anterior en el sector de la edificación. La obra civil sin embargo se mantiene estable en consumos mínimos históricos con apenas un 2% de incremento en este primer trimestre de 2018.

Por su parte, las exportaciones de cemento y clínker continúan con su evolución muy negativa. Así al mes de abril y en términos de año móvil (mayo 17-abril 18), registraron una reducción del 25%, alcanzando una cifra de 2,1 millones de toneladas. Como ya veníamos anunciando, el alto coste eléctrico y energético derivado de la falta de apoyo institucional para la valorización energética de residuos en las fábricas de cemento, el resultado negativo de la subasta del servicio de interrumpibilidad y el alto precio de los derechos de emisión de CO2, siguen penalizando fuertemente la competitividad de la industria cementera andaluza y española frente a la producción en otros países con mejores costes.

Variación interanual Índice Demanda Cemento – IDC (año móvil)